Así es, las cosas suelen venir en pares...
un par de pastillas
un par de mentiras
un par de besos
un par de amores
un par de esto
un par de aquello
y a pesar de llenarnos la vida con un par de cosas sigue siendo el bendito saco vacio que alguien olvidó en la orilla del mar.
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3 comentarios:
papiona papiona
cuando nací llegué a este mundo con un par de ojos. desde que comencé a NO ver, tengo cuatro.
plop!
y el par de patos?
(gracias a dios por los bingos, amen!)
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